¿Eres de esas personas que programa la alarma del despertador media hora antes de lo necesario porque NECESITAS darle al “snooze" o "posponer alarma” varias veces antes de decidirte a levantarte por fin?
¿Y qué sucede cuando finalmente lo haces?
La mayoría de las veces puede ser que te des cuenta que le diste demasiadas veces y que ya “vas tarde” para todo lo que tenías que hacer.
Empiezan las prisas.
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Hay quién relaciona el éxito personal con el hábito de despertarse temprano, sea cierto o no, la verdad es que adquirir este hábito puede beneficiarte de muchas formas:
1. Un desayuno saludable
Seguro que sabes que el desayuno es la comida más importante del día… ¿pero cuántas veces te lo saltas?
Cuando vamos a la carrera puede ser que fácilmente optemos por comer alimentos poco saludables o directamente dejemos caer de nuestra lista de actividades nuestro propio desayuno.
Convertirte en una persona madrugadora puede repercutir en tu salud al tener la oportunidad de disfrutar de un desayuno saludable y sin prisas.
Además, el desayuno aporta el combustible necesario después de una noche de ayuno e incide en tu rendimiento para el resto del día.
Y si nada de esto te convence, quizás te interesará saber que se ha demostrado que las personas que desayunan tienden a ser más delgadas que las que no lo hacen ;-) .
2. Cuidando de ti
Las personas que trasnochan y se acuestan tarde tienen más problemas para incluir en su planificación diaria un espacio reservado para hacer ejercicio o cuidar de sí mismas.
Levantándote antes podrás dedicar este tiempo a realizar alguna lectura que tengas pendiente o una rutina de ejercicios que te harán sentir enérgica y motivada el resto del día.
3. Menos estrés, menos olvidos
En lugar de levantarte y empezar a correr para prepararte y poner a punto todos los miembros de tu familia, puedes tener un inicio del día mucho más agradable.
Levantarte temprano te proporciona el tiempo para moverte lentamente, actuar sin prisas, apreciando la oportunidad de vivir un nuevo día.
Iniciar tus mañanas a la carrera puede ser muy estresante, y un nivel elevado de estrés siempre juega en nuestra contra: más olvidos, menos paciencia, menos atención a los detalles que realmente importan, etc.
4. Tiempo sin interrupciones
Madrugar te da pie a tener un día más productivo.
Cuando la mitad del mundo sigue durmiendo puedes lograr mucho más con la rutina de la mañana.
Si decides dedicar este tiempo “extra” a trabajar, descubrirás que puedes hacer muchas más cosas en el mismo tiempo que en cualquier otro momento del día debido a que dejarás de lado la mayoría de las interrupciones.
Sin nadie a tu alrededor, sin niños reclamándote a cada momento, llamadas comerciales interrumpiendo tu flujo de trabajo y disfrutando del ambiente silencioso propio de estas horas podrás avanzar mucho más que en cualquier otro momento del día.
5. Vida familiar más satisfactoria
Saber que ya has realizado las tareas clave a primera hora de la mañana te va a permitir afrontar el día de mucho mejor humor.
A medida que el día avanza sin que hayas realizado ninguna de las tareas que te habías propuesto, la desagradable sensación de no tener tiempo para nada se va incrementando y como el día se complique, empezarás a renegar incluso de la presencia de tus hijos al ver que las posibilidades de conseguir lo que te habías propuesto empiezan a esfumarse.
Realizar todas esas tareas clave a primera hora de la mañana te va a permitir pasar el día disfrutando de tus hijos de mejor humor y con mayor dedicación.
6. Preparar tu día con antelación
Seguro que tienes grandes metas y te has propuesto lograr muchas cosas en tu vida, pero para conseguirlo no basta con soñar a lo grande, también necesitas elaborar un plan de acción que te lleve hacia tus objetivos.
Una buena planificación incluye tareas y sub-tareas que deberás distribuir y organizar en función de su importancia, impacto y dificultad.
Dedicar los primeros 15-20 minutos del día a planear qué vas a hacer durante el día y decidir cuál es el orden más apropiado para conseguir los mejores resultados puede tener un gran impacto en tus resultados a largo plazo.
Estos son sólo algunos de los beneficios que podrás experimentar al empezar a madrugar.
Si crees que necesitas más motivación e inspiración, trata de poner tu despertador una o dos horas antes durante un par de semanas y párate a reflexionar sobre cómo te sienta.
Despertar temprano no es algo que funcione para todo el mundo, pero puede ser justo lo que necesitas para ser más eficaz en todo lo que ya haces.
En ESTE artículo encontrarás algunas estrategias que te ayudarán a implementar el hábito de levantarte más temprano y sacar más rendimiento de tu día.
Neus Virgili
Maternidad a Tiempo Completo, Gestión del Tiempo y Desarrollo Personal
Es muy buena idea, así visto sólo tiene pros jeje Yo soy narcoléptica y por la noche tengo muchos despertares, normalmente antes de las 6 es el último y me duermo ya hasta apagar mil veces el despertador a las 7 para acabar saliendo sin desayunar al trabajo. Voy a probar a levantarme en ese último despertar durante una semana a ver que tal me sienta ;0)
ResponderEliminarUff me cuesta el madrugón! Aunque reconozco que mis horas productivas del día son po mañana
ResponderEliminarYo también creo que el día sería más llevadero si me levantara un par de horas antes que el resto de la familia, pero lo he intentado mil veces y no lo consigo. Cuando suena el despertador, el sueño me puede y todos mis buenos propósitos se pierden. Y luego, me levanto tarde y de mal humor por empezar el día saltandome objetivos. Así que sigo en modo nocturno sabiendo que, con el cansancio de todo el día, no se rinde lo mismo
ResponderEliminarEstaré atenta para no perderme cuando publiques esas estrategias que mencionas
Hola Jessica! Justo hoy he publicado esa segunda parte del artículo, puedes leerlo aquí: http://educarpetas.blogspot.com.es/2014/10/consejos-empezar-madrugar.html
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